LA AVENTURA DE SER CRISTIANO (introducción)

Todos existimos en el mundo por alguna razón, mejor dicho por una razón por la grandiosa voluntad de Dios, nadie viene al mundo por su propia cuenta aunque muchos piensan que han llegado simplemente por casualidad a donde están pero no es así porque todos los designios de Dios son perfectos y eso los ha llevado a donde están.

El hecho de existir para todo ser humano en si mismo es una aventura, porque todos estamos en busca de un destino, de una fortuna que consideramos que es nuestra pero por nuestra propia naturaleza nos confundimos y nos alejamos del mismo, nos alejamos de la ventura, de la fortuna que nos espera porque nos guiamos por nuestras fuerzas y por cada impulso que corre por nuestras venas como si esa fuera la forma correcta para llegar a algún lugar.

Este Blog tiene pequeñas reflexiones sobre la vida cristiana, esta plagado de sentimientos y emociones propias que me llevan a pensar en pequeños detalles que Dios me permite ver, pero antes de seguir regalando pequeñas narraciones que nos llevan a pensar, voy a contar la mayor historia que puedo contar. Voy a contar la aventura de ser cristiano. No se olviden que es literario por lo que siempre existirá invención y juegos literarios pero que considero necesarios porque no encuentro palabras simples y directas para narrar mi historia.

Lee con atención y presta atención a la mayor cantidad de detalles que te sean posibles, porque si lo haces seras atrapado en la red que construyen mis palabras. Para comenzar mi aventura tengo que contar como llegue a cumplir el primer requisito, es decir contar como llegue a ser cristiano. 

No recuerdo muy bien el año, pero si recuerdo la habitación donde sucedió. Una habitación pequeña que se había construido recientemente, esta se encontraba al final del patio de una casa muy antigua la cual pertenecio a mi padres pero que no me era posible heredar porque no era hijo de su esposa sino de su empleada. Toda mi vida, y aún hoy en día tengo que cargar con esa marca que me impusieron mis mayores antes de que yo naciera, era el hijo de la amante y de un empresario, un ser viviente que irritaba a cualquiera porque todos me miraban con desprecio por ser (para todos ellos) una consecuencia de las malas acciones de mi padre.

En esa habitación, dormíamos yo y mi madre,  ella trabajaba todo el día en la casa de mi padre limpiando cada rincón de esa enorme casa, no había día en que no recibiera humillaciones y sea tratada como un objeto, una maquina de limpieza a la que se debía enchufar debes en cuando para que no perdiera la energía. Era una situación desesperante para cualquiera, más para un personaje literario como yo.  Los constantes maltratos alejaron a mi madre de mi, como de todo lo que le rodeaba parecía que perdería la cordura y cometería cualquier locura sin que ni siquiera brevemente se asomara la razón a su mente.

Yo no se de donde pero mi mamá tenía una gran amiga, Juana, su mirada ya me tranquilizaba  y su voz relajaba a mi mamá, por mucho tiempo fue una mujer enigmática e intrigante, hasta que pude encontrar la respuesta, mi mamá llegó al límite de tanto golpes psicologicos a su persona que intento matarse y Juana me ayudo, gracias a ella no paso a mayores. Mientras mi mamá estaba internada Juana se acerco a mi, me consoló y me habló de porque afrontaba los problemas con tanta soltura. 

Ahí conocí el pasaje que voy a citar:

"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo sino para que el mundo sea salvo por él." Juan 3: 16-17

Seguramente muchos saben que estas palabras son de Jesús y comprenden su significado profundo, perfecto que cambia la vida de cualquiera que las comprende y las acepta de verdad, para mí era la primera vez que alguien me las decía y explicaba con tanta claridad. Comprendí que lo que me pasaba, lo que le pasaba mi madre tenia que ver con el pecado, con todas esas acciones que nos alejan de Dios,  Me habló de sus consecuencias en el presente como las futuras, pero me mostró en su vida claramente la diferencia de tener o no tener a Dios en la vida.

Aunque mi madre no quiso escucharla en esos momentos, Juana me dio un consejo, mejor dicho me regalo un pasaje hermoso:

"Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar." Jeremías 1: 10

Al principio no pude entender lo que me decía pero mientras más pensaba en esas palabras, mas me daba cuenta que mi vida podía ser de bendición en la vida de los otros, dejando que Dios actué en mi vida, pero si no vivía la vida cristiana seguramente podía tener consecuencias nefastas en la vida de los otros. 

La historia de mi vida, es la aventura de ser cristiano, son los relatos de como Dios obra en mi vida y como a través de la obra divina muchos más me acompañan en esta grandiosa aventura, donde cada una de las reflexiones escritas en este blog son parte de la misma.